«aiuntados en el campo
de Estibaus segun que lo havemos de uso de costumbre de nos juntar...» (Altza, 1390)

La sentencia pronunciada por el Tribunal Supremo el 10 de junio pone fin al conflicto de mugas que arrancó en 2005 a instancias del Ayuntamiento de Pasaia, en el marco de la celebración del 200 aniversario de la fundación de la Villa de Pasajes. Los autores del informe jurídico que respaldaba la reivindicación afirmaban en una entrevista  (Pasaian, enero 2006) que “si el tema acaba en los tribunales, con el acta de Vargas Ponce y la sentencia de 1890, la razón se la darán a Pasaia.” Las sentencias de todos los tribunales que han intervenido en los procesos, sin embargo, han fallado en contra, dejando bien a las claras que aquel informe jurídico fundamentado en la recreación histórica construida a partir del “descubrimiento” por parte del abogado y secretario municipal pasaitarra del archiconocido auto de Vargas Ponce, era un informe basado en prejuicios y sin fundamento.  (Blog “La Marcha Gris. Sobre el conflicto de mugas con Pasaia“, 2005-2011)

Ya en 2011, el Supremo sentenció “que es de todo punto cuestionable” que aquel auto de Vargas Ponce deba considerarse como “‘actos administrativos’, aún eficaces y pendientes de sólo de ejecución en parte“. Un cuestionamiento “que lo es aún más si, como advierte la sentencia de instancia y apreciamos de modo más completo a través de las alegaciones de las partes, en el año 1939, con Acta adicional de 1944, se tramitó un procedimiento con objeto de fijar la línea límite común a los términos municipales de Alza (anexionado en el año 1940 al de San Sebastián) y de Pasajes, que culminó con acuerdo de los representantes de ambos municipios, salvo en el mojón n.º 2, y desde el n.º 24 hasta el final de la línea de costa del mar Cantábrico, levantándose en esos tramos (entre los mojones 1º y 2º, y entre el 24 y ese final) una línea de delimitación provisional“.

Después de aquel varapalo, el Ayuntamiento de Pasaia solicitó en 2014 a la Diputación Foral que procediera a la ejecución de la alteración de términos que dio lugar a la constitución del municipio de Pasaia en 1805 advirtiendo, que de no ser atendida su solicitud, volvería a recurrir a los tribunales. Entonces, aquí, en Estibaus lo denunciamos (”Mugas con Pasaia: insisten en manipular e imponer“). Seis años después, tras agotar todas las vías judiciales, esta última sentencia del Supremo pone punto final a las pretensiones del Ayuntamiento de Pasaia de imponer sus pretensiones por la vía política y judicial.