Febrero en Herrera
Herripe Auzo Elkartea
Durante algún tiempo pensábamos que Febrero era un mes tranquilo, pero eso antes, por lo menos en Herrera.
Tras el numeroso grupo de la Kantujira del viernes 31 de Enero y después de la Candelaria con la costumbre cristiana de la bendición de las velas, día festivo antaño, damos paso al día 3. San Blas, con la opila del mismo nombre que, para seguir la costumbre y ser eficaz, debe ser bendecida junto con cualquier otro alimento o condimento que pueda usarse en lo sucesivo, para proteger nuestras gargantas de todo mal.
Son fechas en las que el cristianismo parece unirse y/o acaparar unas costumbres mucho más antiguas, que se reflejan en frases que han pasado generación tras generación como kandelaria bero, negua gero. Kandelaria hotz, negua motz. (M. Jesús Intxausti Huizi creció oyendo esto en su casa)
El martes, día 4, SANTA AGEDA BEZPERA, los coros recorrerán el Barrio. Aunque quizás no sea la actividad con más respuesta, debido a la vorágine en la que nos movemos de actos multitudinarios, pero tiene un gran arraigo como una expresión ancestral que se pierde en el tiempo y se relaciona con la intención de, con la ayuda de los golpes rítmicos de bastones y cayados, instar a Ama Natura a despertarse, tras el solsticio de invierno.
Y el sábado 8, y ya formando parte de esa historia más cercana, con más bullicio y buen humor, KALDEREROAK. Vienen de la Hungría, y según la versión más popular, llegan a San Sebastián pero, indudablemente, pasan primero por Altza y en Herrera se paran todos los años, cambiamos impresiones, nos traen noticias de sus tierras, intercambiamos información de cómo va el mundo y qué posibilidades tenemos, cenan con nosotros y siguen su camino.