Altza: Historia y Patrimonio
“Argi eta garbi Altzaren ondarea aberatsa, askotarikoa eta interesgarria da; baina batzuetan ezkutua, gordeta egoten da hirigintza zail eta kaotiko baten atzean”. Beatriz Herrerasen ikerketa gonbite bat da gure inguruan bertan daukagun aberastasuna deskubritzera. Adibide moduan, argazkiko eraikina, bitxia eta nortasun handikoa, Buenavistan zoko-zikin dagoena eta botatzea baino etorkizun hobeagoa merezi duena.
La evolución histórica de Altza se hace patente de manera clara a través de sus vestigios patrimoniales. A través de su trazado urbanístico, de sus caseríos, de sus casas de vecindad, de sus iglesias, de sus fábricas se puede analizar cada una de las épocas históricas que le tocó vivir. Incluso el patrimonio desaparecido nos ayuda a interpretar y a conocer el espacio en el que nos encontramos. Estamos a todas luces ante un patrimonio rico, diverso e interesante; su existencia sin embargo en ocasiones se haya enmascarada, oculta tras un urbanismo difícil y caótico. A modo de ejemplo señalamos algunos caseríos de gran valor como Tomasene que debe recibir su reconocimiento o el caserío Txipres de severo aspecto, ambos nos hablan de una forma determinada de ocupación del espacio. Los numerosos restos de fortificaciones militares nos confirman en este caso la posición estratégica de la que siempre disfrutó Altza. Los últimos 150 años marcaron una fuerte y decisiva transformación en su entramado territorial. Los nuevos ejes de comunicación y la industrialización fueron los grandes responsables. Testigo de ese desarrollo es el impresionante viaducto de Herrera, una potente obra de fábrica que ha superado con creces los 100 años. También en Altza se alzaron en las primeras décadas del siglo XX interesante ejemplos de la más novedosa y moderna arquitectura industrial. La Fábrica de Duelas Llusa y Cía obra del arquitecto catalán Guardia es un ejemplo único en nuestro entorno de la influencia modernista en las construcciones fabriles. La fábrica de caucho MRM obra del arquitecto Fausto Gaiztarro recoge en su construcción los postulados racionalistas en boga. La vivienda obrera nos muestra también en Altza un interesante catálogo. En él tienen cabida los postulados higienistas de la ciudad jardín presentes en las Casas Baratas de la Colonia María Cristina, los barrios obreros entre los que destacamos las casas de galería o también conocidas como de corrala presentes en el Barrio Santa Bárbara. Sin olvidarnos de las casas de vecindad o de pisos que surgen por oposición a la ciudad jardín y como solución al problema de la vivienda. Entre otras, destacamos las viviendas en altura que Ramón Cortazar proyectó en Intxaurrondo y que se alzan paralelas a la antigua línea del tranvía. Problema éste el de la vivienda siempre de actualidad, y siempre quizá con demasiadas esperanzas puestas en el territorio de Altza.