Leer el documento de anexión
Elena Arrieta / Miguel Angel Zapirain
(HERRI-PE Auzoko Elkartea)
En nuestros días, pensar desde Altza en retomar aquel famoso documento de anexión, parece a muchos una idea peregrina y que no va a llevarnos a ninguna parte. Este sector puede tener razón. Altza ha cambiado mucho. La añoranza de lo que Altza era, parece fuera de nuestros días. Sin embargo no resulta tan descabellado pensar en un cambio de la voluntad política que, al fin y al cabo para empezar no es más que eso. en los últimos años hemos visto resurgir los Ayuntamientos de Astigarraga y Lasarte; los movimientos en este sentido de Igeldo y de Zubieta. Lo que antes era un pueblo, con todos sus servicios, escuelas, etc., con sus cosas buenas y malas, se convirtió en un barrio grande, que se ha ido desmembrando en unos sub-barrios (?) y hemos llegado a lo que tenemos hoy. Y lo que tenemos hoy a muchos no nos gusta y nos planteamos que en lugar de aceptarlo tenemos que seguir adelante y reivindicar la mejora a la calidad de vida a que todos tenemos derecho. El caos urbanístico de Altza (entendiendo por Altza su antiguo territorio), accesos, problemas de tráfico, aparcamientos, saneamiento… nos pueden dar una idea del poco interés que hemos despertado en el Ayuntamiento de Donostia. Y a tenor de lo que tenemos en perspectiva, no parece que vaya a mejorar. Porque el hoy no es lo más importante. Hay que mirar al mañana y a lo que dejamos a las siguientes generaciones que, dicho sea de paso ya están ahí. Piénsenlo… Leerse el documento de anexión, ver lo que no se ha cumplido y exigirlo, no es tanta tontería… Puede ser la vía para mejorar la calidad de vida de Altza.