Altzabasoa, el gobierno municipal y la ley de Murphy
Iñigo Landa
El pasado mes de mayo representantes del gobierno municipal presentaban una campaña para dar a conocer la reserva forestal de Añarbe, un magnífico espacio natural que gracias a las asociaciones naturalistas y las instituciones recientemente ha alcanzado el alto grado de protección que merecía. Pero esta buena noticia municipal también ha traído consigo otra que nos ha dejado muy mal sabor de boca: la parte donostiarra de la reserva de Añarbe no es otra que el monte de Altzabasoa al que le han cambiado el nombre por Errekabeltz, nombre de un arroyo.
Desde que Donostia se anexionó Altza ha sido una práctica muy común cambiar, deformar y hacer desaparecer topónimos. En el ayuntamiento cambian las caras pero no las prácticas. Así, documentos elaborados en la época Elorza-Letamendia, como el que debía “proteger” el patrimonio construido o el que definía los barrios, han encontrado su mejor valedor en el actual gobierno municipal, reduciendo los elementos de patrimonio a proteger (ver en Estibaus de mayo pasado) y negando la condición de herreratarras a dos partes de las tres en que dividieron Herrera.
Ahora han hecho desaparecer el nombre de Altzabasoa del mapa, y nos tememos que aún puede ser peor. En el folleto que han repartido nos dicen que “algunos de los mojones que marcan el límite entre Donostia y Errenteria siguen allí, escondidos entre la vegetación.” Cuando se den cuenta que alguno de los mojones tiene cincelada en la piedra la “A” de Altza y no las “SS” donostiarras, no tardarán en quitarlas, porque en lo que a Altza se refiere, la ley de Murphy tiene plena vigencia: si algo puede ir mal, irá mal. Y, si no, al tiempo.
2013, 9 de Octubre
Es lamentable. Una y otra vez la misma política de falta de respeto. No tienen ninguna necesidad de cambiar nada y sí tienen la obligación de respetar la personalidad de lo que administran. Además, no parece que tengamos nada que hacer. No importa donde vayamos, a quien se lo digamos. ¿quién decide y por qué? Políticos, técnicos… Se nos dice: es inútil, ellos van a lo suyo…. Y yo me pregunto ¿y qué es lo suyo? ¿no era lo nuestro…?