El accidente
Luis Lemoniez Zappino
El 17 de octubre de 1907, ocurrió algo en el barrio de Herrera. Ese algo fue el primero de los accidentes de automóvil que hubo en la ciudad de San Sebastián. Ese accidente seguramente cambió la vida del barrio, pues el nombre de Herrera, empezó a oírse y cuando se hizo la “Capilla Zappino” en honor de D. Luis Zappino Samaniego, muerto en dicho accidente, capilla edificada por su viuda, Dña. Teresa Barcaiztegui Manso, se empezó a oírse más, y cuando la misma Dña. Teresa hizo las escuelas, Herrera fue el núcleo principal de la Villa de Alza. En menos de veinte años, aquellos cuatro caseríos que formaban el barrio de Herrera, se convirtieron en uno de los barrios más importantes de San Sebastián. No solo fue el accidente del Sr. Zappino, el origen de un populoso y pujante barrio, sino que además, el cercano puerto de Pasajes, hicieron que cantidad de personas de otras regiones (Galicia, Castilla, Navarra, y La Rioja), vinieran a trabajar y encontraran su ubicación en el gran barrio que hoy es Herrera.
“La Capilla Zappino” (1972). Foto Pedro Navarlaz
2020, Ekainak 8
Estoy casado con Mª Pía Lemoniez Zappino, nieta de Luis Zappino Samaniego y Teresa Barcáiztegui Manso.
¡Enhorabuena por esta reproducción!
La familia Zappino fue muy importrante en San Sebastián; Federico Zapiino Barcáitegui, hijo de Luis Zappino y Teresa Barcáitegui, fue durante muchos años Vicepresidente del Banco Guipuzcoano, así como y Gerente de PYSBE desde 1936 a 1965 y Presidente desde 1965 hasta su fallecimiento en 1972