La romería de Uba de este año
ÁngelCalvo
Dos son las cosas que han marcado este año la Romería de Uba. La falta de Norberto Chiapuso y el tener la ermita el culto compartido con los cristianos ortodoxos.
La primera es una triste sensación íntima de la falta de una persona tan ligada a esta celebración y que tantas veces le has visto participar y organizarlo todo.
Nuevas personas se han encargado en suplirle y en hacerlo todo bien, pero perdónenme para mi no es lo mismo y con la jubilación no hace mucho tiempo de Don Fernando Garijo se ha cumplido un ciclo en la historia de esta romería.
Dejando a un lado lo personal, la segunda cosa es la que ha impactado en los asistentes. Compartido el edificio interiormente ha ganado en prestancia. Sus muros antes desnudos se han visto repletos de cuadros de santos y altarcillos, entre ellos San Sebastián, interpretados en su liturgia ortodoxa pero muy reconocibles. Y que decir de su gran lámpara central.
La ermita ha ganado en calidez y prestancia por su actividad religiosa casi diaria. Muchas felicidades a las personas que han conseguido que dos religiones se pongan de acuerdo en algo.
Unas ciento cincuenta personas han llenado el recinto, el rito se ha cumplido nuevamente el Lunes de Pascua de Pentecostés. Primeramente el Rosario luego la Misa entre algún que otro llanto infantil para finalmente poder besar la txikita imagen de Uba para encomendarnos a su protección.
A la salida se han podido recoger las estampitas de la Virgen. Este año el buen tiempo ha acompañado y no ha habido trikitixa a la salida.